CONSEJOS PARA EL CUIDADO DE TUS EXTENSIONES
Para evitar la pérdida de grasa natural, lo más recomendable es utilizar un champú especial para cabello seco, así la extensión se hidratará de manera continua lavado tras lavado.
En ningún caso se recomienda lavar la cabeza boca abajo, pues el peso del pelo puede provocar que la extensión se desprenda. Es recomendable cepillar el cabello antes de lavarlo. Para no crear enredos, el enjabonado debe hacerse con el pelo extendido hacia abajo, evitando frotarlo todo junto subido a la cabeza.
En las extensiones de clips, el lavado no tiene por qué ser diario, sino cuando el cabello esté sucio. Incluso podemos cambiar el peinado de las extensiones (rizarlas y alisarlas) sin necesidad de lavarlas con anterioridad.
Las extensiones hay que cuidarlas teniendo en cuenta que no es nuestro cabello natural, es decir, no perciben ni la grasa ni el agua que aporta el organismo a nuestro pelo a través del folículo piloso. Por ello, tenemos que hacer especial hincapié en hidratarlas y nutrirlas cuidadosamente mediante el uso de acondicionadores y mascarillas de calidad para que queden sedosas como el primer día. En el caso de las extensiones adhesivas, la aplicación de estos cosméticos debe hacerse de medias a puntas, evitando la raíz para que no se produzca el desprendimiento de la extensión.
Los productos orientados al cabello graso, al tratamiento de la seborrea o de la psoriasis del cuero cabelludo y aquellos que contienen biotina (“champú de caballo”) están completamente contraindicados, ya que pueden deshidratar en exceso el cabello y hacerlo propenso al enredo.
Aunque nuestras extensiones se presentan peinadas de forma lisa, pueden transformarse perfectamente en onduladas mediante el uso de espuma y difusor.
Para que el cabello de las extensiones aguante durante mucho más tiempo sin quebrarse, se recomienda usar un cepillo con cerdas en lazo. El cepillado debe ser diario, siempre empezando por las puntas y continuando hacia arriba, para que los posibles enredos (tanto los del propio cabello como los de la extensión) no se arrastren provocando posibles nudos.
Nuestras extensiones son de cabello 100% humano. Esto significa que podemos peinarlas tanto con secador como con tenacillas o planchas sin ningún problema.
Al pasar la plancha a nuestras extensiones, lo recomendable es que sea a una temperatura máxima de entre 140/160 ºC, pues debemos tener en cuenta que el agua de nuestro cabello se regenera con la alimentación, pero el de las extensiones no. Por ello, si aplicamos un calor excesivo provocaremos que el agua que tiene el cabello de las extensiones poco a poco se vaya perdiendo. Recomendamos, además, la aplicación previa al planchado o secado de un spray protector térmico con efecto antiestático. Cuanto más protejamos a las extensiones del calor excesivo, más tiempo nos durarán y con aspecto más saludable.
Si las extensiones están sujetas mediante un punto de queratina, deberemos tener cuidado con el calor que desprende tanto la plancha como el secador, pues si lo aplicamos justo en la raíz el pelo de la extensión puede desprenderse o crear enredo al derretirse el punto de unión.
En las extensiones adhesivas, debemos evitar también aplicar calor sobre el “sándwich” para impedir que la extensión pueda despegarse y el mechón, desprenderse.
Nuestro cabello es 100% humano. Esto significa que podrás teñir las extensiones sin ningún problema con cualquier tinte.
En el caso de las extensiones de queratina y en las adhesivas es preferible hacerlo antes de la colocación y evitando siempre el contacto del producto con el punto de unión. Si se tuviera que realizar después de la colocación, se deberá esperar un mínimo de 48 horas para poder hacerlo y asegurar así la correcta sujeción de la extensión.
Decolorar las extensiones está contraindicado, pues el líquido decolorante puede provocar que el cabello se deshidrate en exceso, favoreciendo los enredos. Sólo el cabello virgen puede ser sometido a este tratamiento.
Se recomienda evitar la aplicación de cualquier tipo de tratamiento químico en las extensiones, como permanentes, alisados y tratamientos de queratina o desrizantes.
Para dormir con las extensiones, lo más recomendable es hacerlo con el cabello recogido bien en una cola baja bien en una trenza.
Desaconsejamos dormir con las extensiones de clips puestas, ya que las peinetas pueden llevarse consigo el propio pelo con los movimientos de la cabeza.
Tanto la sal y arena de la playa como el cloro de la piscina resecan y estropean mucho nuestro cabello. Por tanto, es lógico pensar que nuestras extensiones también sufrirán estos efectos negativos. Lo más recomendable es bañarse tanto en el mar como en la piscina con el cabello recogido y evitar en lo posible que se moje. Para impedir que pierdan suavidad y se resequen, debemos sobre-hidratar nuestras extensiones con mascarilla y cepillarlas en cuanto tengamos ocasión.